Los estudiantes, y más en época de exámenes, pueden pasarse muchas horas sentados. Esta inmovilidad no es recomendable ya que puede afectar a la espalda y la circulación sanguínea.
Es aconsejable cambiar de posición cada hora. así se previene el cansancio y la pérdida de concentración.
La espalda debe estar recta, mientras que los ojos deben mantener una distancia adecuada respecto el libro o el material de estudio.
Es fundamental una buena iluminación que enfoque claramente la superficie de lectura.
En ocasiones, y buscando la comodidad, tendemos a tumbarnos en la cama o el sofá para estudiar. Esta postura no es recomendable ya que es fácil quedarse dormido.
También es muy importante mantener una temperatura adecuada, la habitación o sala no puede estar a una temperatura muy alta o baja.
Continuaremos….